Plazos de pago en el transporte: La tendencia positiva se consolida

Este enero de 2024 trae buenas noticias para el sector del transporte por carretera en España: los plazos de pago a los transportistas se mantienen en la senda de la reducción, situándose en una media de 66 días, muy cerca del límite legal de 60 días establecido por la Ley 15/2009.

Este avance, confirmado por el Observatorio permanente de la morosidad y los pagos en el sector del transporte por carretera de Fenadismer, se debe en gran medida a la aplicación del régimen sancionador contra la morosidad, aprobado a finales de 2021. La intensa actividad de inspección por parte del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible también ha contribuido a mejorar la situación.

Las empresas cargadoras e intermediarias que incumplen la ley son cada vez menos: en enero, el 66% de los casos de morosidad se situaron en la franja leve (entre 60 y 90 días), mientras que el porcentaje de pagos a más de 120 días se redujo al 11%, frente al 20% de 2022.

En cuanto a los métodos de pago, la transferencia bancaria sigue siendo el más utilizado (67%), seguida del confirming (25%), el pagaré (7%) y el cheque (menos del 1%).

Próxima publicación de la lista de empresas morosas

El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible publicará en breve en su página web oficial la nueva lista de empresas sancionadas por morosidad durante el segundo semestre de 2023. Esta medida, contemplada en la Ley 13/2021, busca fomentar el cumplimiento de la ley y proteger a los transportistas de prácticas abusivas.

Retos por delante

A pesar de los avances, aún queda camino por recorrer. El objetivo final es alcanzar el plazo legal de 60 días de pago en todos los casos. Para ello, es necesario seguir aplicando la ley de forma contundente y concienciar a las empresas cargadoras e intermediarias de la importancia de respetar los derechos de los transportistas.

Un sector del transporte más fuerte y sostenible

La reducción de los plazos de pago es fundamental para asegurar la viabilidad económica del sector del transporte. Unos plazos de pago justos permiten a los transportistas planificar su actividad financiera con mayor seguridad, invertir en la renovación de sus flotas y mejorar sus condiciones laborales.

En definitiva, la lucha contra la morosidad es un paso esencial para construir un sector del transporte más fuerte, competitivo y sostenible.

Además de las medidas mencionadas, otras iniciativas que podrían contribuir a mejorar la situación son:

Promover la cultura del pago puntual a través de campañas de sensibilización.
Fomentar el uso de plataformas digitales que faciliten la gestión de los pagos y la trazabilidad de las operaciones.
Reforzar la formación de los transportistas en materia de derechos y obligaciones contractuales.

El futuro del sector del transporte depende en gran medida de la capacidad para garantizar un trato justo y equitativo a los transportistas. La reducción de los plazos de pago es una señal positiva en este sentido, pero aún queda mucho por hacer para alcanzar un sector del transporte realmente sostenible.