Las empresas dedicadas al transporte de mercancías internacional necesitan contar con un almacenaje de sus mercancías óptimo, puesto que, si no se mantiene una buena seguridad y calidad en el aprovisionamiento de las mercancías, no se podrán prestar servicios eficaces a nuestros clientes. Es aquí donde entra en juego el depósito aduanero, que puede ser fundamental para la implementación de una buena estrategia de almacenaje de tu negocio.
Índice:
Un depósito aduanero es un almacén en el que se almacenan las mercancías que controlarán los agentes de aduanas en un lugar destinado sin tener que pagar los derechos e impuestos de importación hasta que estas sean asignadas a un régimen definitivo.
El propósito del depósito aduanero es facilitar el proceso de comercio internacional y permitir que los importadores y exportadores cumplan con las regulaciones aduaneras de manera eficiente. Los titulares de los bienes pueden ser el importador, exportador, o un tercero autorizado conocido como un depositario aduanero. En algunos casos, el depositario aduanero también puede proporcionar servicios adicionales como el almacenamiento, manejo, embalaje y transporte de los bienes.
Existen seis tipos de depósitos aduaneros subdivididos en “Depósitos aduaneros públicos” y “Depósitos aduaneros privados”.
Los depósitos aduaneros públicos son un espacio autorizado para el uso y almacenamiento de mercancías por parte de cualquier persona. El depositante o cliente (o su representante) es el que lleva a cabo las modificaciones en lo referido a la vinculación o desvinculación del depósito aduanero.
Tipo A
La responsabilidad recae sobre el depositario (almacén)
Tipo B
El compromiso recae en el depositante (cliente)
Tipo F
La gestión es responsabilidad de las autoridades aduaneras
Tipo C
El depositario es la misma persona que el depositante. El procedimiento de despacho es el habitual.
Tipo D
El depositario es la misma persona que el depositante. El despacho se debe realizar por simplificado de domiciliación.
Tipo E
Es un depósito que se usa solo para una operación concreta. Es un depósito ficticio cuyo uso solo se autoriza para un caso específico.
Asimismo existen otros tipos de depósitos aduaneros como el almacén de depósito temporal (ADT) en el que se reciben mercancías no comunitarias a las que se le asignará posteriormente un régimen aduanero. Aquellas mercancías que entran en un ADT tienen suspendidos los aranceles, IVA y tienen que realizar despachos de importación en 20 o 45 días.
Antes de finalizar los plazos temporales establecidos, la mercancía debe tener un destino asignado, puesto que de lo contrario se tendrá que solicitar una prórroga para destruirlas.
Los ADT pueden ser tanto almacenes cerrados, como zonas delimitadas dentro de las instalaciones primarias de aduanas o zonas francas o espacios geográficos muy cercanos a las oficinas de la agencia tributaria (aduana) más cercana.
Fuentes: https://bit.ly/3lmdkzy / https://bit.ly/3iITzAC
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